Considerado el film más mítico y prototipo de la serie dedicada al agente 007, esta producción dirigida por Guy Hamilton consagró a Sean Connery como el intérprete perfecto del personaje de Ian Fleming, gracias a su equilibrada combinación de acción y humor, y el carisma de intérpretes como Gert Frobe y Honor Blackman.
Al rojo vivo
James Cagney llevó a cabo una de las mejores encarnaciones de un criminal perturbado en esta extraordinaria película de Raoul Walsh, uno de los grandes clásicos del cine negro de todos los tiempos y un relato pletórico de dinamismo, violencia e inventiva, que va más allá del género policíaco hasta alcanzar cimas de alta tragedia.